Una compañía de construcción que trabaja en la expansión del aeropuerto internacional de Sao Paulo, previa a la Copa del Mundo del 2014, obligó a 111 hombres a trabajar en condiciones esclavizantes, según el ministerio de trabajo.
El inspector del ministerio, Renato Bignami, dijo a G1, el portal noticioso de Globo TV, que la empresa OAS hizo que cada trabajador pagara el equivalente a 250 dólares para asegurarse un empleo.
Funcionarios del ministerio dijeron el jueves que muchos tuvieron que dormir en colchones sobre el piso sin acceso a agua, refrigeradores o cocinas.
En declaraciones por correo electrónico, OAS y el aeropuerto negaron toda participación en la contratación de los 111 trabajadores y aseguraron que cooperan con los investigadores.
Aunque los trabajadores al parecer no fueron retenidos contra su voluntad, fueron obligados a vivir en condiciones tan miserables que el ministerio los definió en condiciones parecidas a la esclavitud.
G1 dijo que cada trabajador será indemnizado con el equivalente a 3.000 dólares y enviado de regreso a su lugar de residencia.